Si en los antiguos juzgados del crimen los magistrados investigaban, formulaban cargos y aplicaban las penas; la reforma procesal penal cambió este proceso y creó el Ministerio Público o Fiscalía que asumió la función de investigar, dirigir a las policías, formalizar y proteger a víctimas y testigos.
Video informativo: Ministerio Público o Fiscalía de Chile